lunes, 28 de noviembre de 2011

Los ricos son más ricos. Los pobres, también.

Si hay una idea que nos encontramos recurrentemente en los artículos de opinión de los últimos tiempos, es la de que desigualdades se han acrecentado en los últimos años. Nos la encontramos por ejemplo en el reciente artículo de Saviano que ha precedido su visita a los muchachos de Occupy Wall Street en Zuccotti Park. En él nos dice que

"Según el Congressional Budget Office, entre 1979 y 2007 las rentas del 90% de las familias ha disminuido novecientos dólares, mientras el del 1 % (de las familias más ricas) ha aumentado más de setecientos mil dólares".

Una idea similar leí en el prólogo del libro Hay Alternativas (libro que leo a ratos para ver si realmente las hay, y de cuya lectura intentaré dar cuenta en este blog, si es que no me puede la pereza). El prólogo lo firma un gurú del anticapitalismo, Noam Chomsky. En él, el lingüista norteamericano nos dice que:

"...para la gran mayoría de la población la renta disponible ha permanecido estancada mientras que la riqueza se ha ido concentrando, a un nivel abrumador, en una facción del 1 por ciento de la población."

Ambos están cerca de reformular el asunto de un modo que también ha tenido bastante pegada últimamente entre los críticos con el sistema, diciendo que cada vez "los ricos son más ricos y los pobres son más pobres". Sin embargo, la reformulación es inexacta, como lo son las afirmaciones de Saviano y Chomsky.

Para verlo, podemos centrarnos en EEUU e ir a ver lo que dice en efecto la Congressional Budget Office que cita Saviano. Como muestra la figura, extraída del sitio de esta oficina que hasta hace poco no tenía el gusto de conocer, es indiscutible que la proporción de la tarta de los ricos ha crecido notablemente entre 1979 y 2007 en EEUU. Sin embargo, dado que la tarta también ha crecido, en 2007 los pobres tienen más tarta de la que tenían en 1979. En particular, podemos ver en el informe (p.53) que la famila menos pobre del 20% de familias más pobres tenía unos ingresos de 18979 $ en 2007, superiores a los 15411 $ ($ de 2007) que la familia análoga tenía en 1979. La mejora es aún más notable si nos fijamos en la familia menos pobre del 40% más pobre, y se incrementa hasta llegar al famoso 1%. En resumidas cuentas: los ingresos de todas las familias han crecido, sólo que los de las más ricas han crecido más.

Son datos que hay que poner en su contexto, claro (por ejemplo, el flujo de inmigrantes que llegan a EEUU con una mano delante y una mano detrás, cuántas personas trabajan por familia, etc...). Podemos preguntarnos si las sociedades más equitativas también crean más riqueza: hay quien dice que es lo que pasa bajo presidencias demócratas. Pero estos datos muestran claramente que una creciente desigualdad no está reñida con una mejora de las condiciones de vida de los que menos tienen. Podría también argumentarse que gracias a que existe el incentivo de una creciente recompensa económica del éxito, la riqueza total crece. Y esto, indirectamente, hace que mejoren las condiciones de vida de los más desfavorecidos.

Los debates verdaderamente interesantes son estos. Lo difícil es llegar a ellos partiendo de premisas incorrectas. Y si uno parte deliberadamente de premisas incorrectas, la tarea se vuelve imposible.

miércoles, 23 de noviembre de 2011

Decálogo-balance del 20N

Podría haberme ido peor:

I. La participación ha sido más que aceptable. Parece que hay mucha gente que sigue pensando que votar sirve para algo.

II. Los muchachos del 15M se portaron razonablemente bien (si es que el "espíritu 15M" no está mejor respresentado por los que se dejaron caer por Sol-eso lo tendrán que decir otros).

III. El PP arrasó, pero atrayendo solo a medio millón de votantes nuevos. Es posible que algo esté cambiando, pero de ahí a pensar que las elecciones se deciden en el centro hay mucho.

IV. Nada de mayoría PP+UPD. Pero si me dan a elegir entre una mayoría absoluta del PP o relativa y condicionada al apoyo de CiU y/o PNV hoy, día 22 de noviembre, no sabría que decirles.

V. Como dice el agudo aviermen, habrá que ver qué sorpresas nos depara Mariano. Si, por ejemplo, dará una decepción a esos muchachos que se besaban en Génova.

VI. En el balcón de Génova estaba también Esperanza Aguirre, a la que me imagino nerviosa. Habrá que seguir los ajustes de cuentas dentro del PP.

VII. Rubalcaba pasa por estos días por ser un pésimo candidato que debería abandonar su puesto. Parece que no hemos aprendido nada con Rajoy. Y sobre todo parece que nos hemos olvidado del candidato Zapatero.

VIII. El nuevo líder del PSOE tendrá que decidir entre culpabilizar de lo ocurrido a "los mercados" o al zapaterismo. El punto III me hace temer lo primero.

IX. UPyD se consolida. Será bueno también que se oigan otras voces del partido magenta, porque la solista a veces desafina.

X. Lamentablemente, Amaiur entra en el congreso con fuerza. Una consecuencia negativa es que la gente empezará a liarse, como Gabilondo.

lunes, 14 de noviembre de 2011

Decálogo de deseos para el 20-N.

Algunos más factibles, otros menos. Los dejo aquí colgados, hagan ustedes lo que puedan:

I. Que la participación sea superior al 70%.

II. Que el PP no logre la mayoría absoluta.

III. Que los muchachos del 15M respeten la jornada de reflexión.

IV. Que los muchachos del 15M, en general, se comporten.

V. Que UPyD saque más de 5 diputados.

VI. Que UPyD tenga la llave del gobierno del PP.

VII. Que bajen CiU y el PNV.

VIII. Que Bildu no entre en el Congreso.

IX. Que Inés Sabanés robe algún escaño a la obsoleta IU.

X. Que Álvaro Pombo sea senador.

jueves, 10 de noviembre de 2011

Cónsuelate como puedas.

Un tipo con ojeras accede a las oficinas del consulado de España en Milán, con el objetivo de hacer llegar unos documentos que acreditan lo listo que es a quien le compete. A su llegada, un hombre de origen caribeño, que es quien organiza la fila, se ocupa de la seguridad y parece que de dar consejos sobre la vida en general, le pregunta (¡en italiano!) si lleva los documentos necesarios para la convalidación de su título. Nuestro héroe, que ha entendido rápidamente que está ante la persona más poderosa del consulado, le hace entender con su mejor sonrisa que ya no tiene edad para esas cosas, pero que gracias por el piropo. Mientras lo intenta, aparecen dos enviados de la Procura di Milano a los que el multiempleado concede prioridad absoluta. Concluidas las pesquisas de los enviados, nuestro protagonista logra entregar su documentación y aprovecha para preguntar que qué fue de las papeletas que habrían de haberle llegado para ejercer su sacrosanto derecho a voto. Se le dice que los inscritos en el registro de españoles en Milán tras el 1 de julio no estarán en las listas. "Me lo podían haber dicho entonces" se queja. Respuesta: "Es que entonces no lo sabíamos". Nuestro hombre abandona la pieza (porque no es mucho más el consulado) apesadumbrado por no poder dar su voto, del que por otro lado no estaba tan convencido. Pero le queda el magro consuelo de poder compensarlo escribiendo algo en su exitosísimo blog.